Con este diseño se quiere dejar constancia de la vegetación existente antes de la urbanización de la zona, el cultivo del olivo.
Los materiales naturales, como la madera y los áridos, y la lámina de agua ayudan a evocar la escena del campo.
En una zona más ordenada, se crea un diseño formal con el predominio de plantación vertical. Y parterres de macizos arbustivos horizontales.